Barbens es una histórica población mencionada a finales del siglo XI y su casco antiguo está incluido en el Inventari del Patrimoni Arquitectònic de Catalunya. Su terreno es totalmente plano y presenta una ligera inclinación, inferior al 1% de este a oeste. El río Ondara cruza el municipio, si bien es un río seco la mayor parte del año.

El término municipal de Barbens aparece dividido en dos unidades. Un sector, llamado Aguilella, es separado del resto del mismo por el municipio de Tornabous. El Canal d’Urgell cruza este sector por el extremo norte, con lo cual, una pequeña parte del municipio resta en secano. El sector principal incluye, además de Barbens, el pueblo del Bullidor; un antiguo núcleo de población prácticamente deshabitado pero de un gran interés cultural.

La estructura urbanística del pueblo ofrece varios elementos de gran interés. Por un lado, en la actual Casa de la Villa encontramos los restos del antiguo Castell dels Templers o Castell-Comanda. Figura en el s. XII cuando el orden de los templarios se instalaron en esta zona de la comarca. Aunque posiblemente tenga su origen en el establecimiento de un antiguo castrum romano. Cabe destacar las prisiones, la escalera barroca, y los diferentes escudos pertenecientes a diversos comendadores que regían la casa, como es el caso de Manel de Montoliu, comendador hospitalario que hizo restaurar el edificio en el año 1753.

En el interior del municipio hay edificios destacados como la Casa Pairal dels Veciana (familia dedicada a la explotación agrícola y miembro fundador de los Mossos d'Esquadra), con sus características torres de piedra, situada a la Plaça de l’Església. Y en la antigua Plaça dels Cavallers de Malta encontramos también otras casas pairales como ca l'Alçamora o cal Pastoret, ambas coronadas por un cimborrio similar al de la comanda.

La Església de Santa Maria de Barbens conserva dentro de su interior una considerable bóveda de cañón de la época de los templarios y el campanario del siglo XVIII. La iglesia parroquial figura documentada el año 1098 en el acta de consagración de Santa Maria de Guissona. En medio de la plaza de la iglesia está situada la Creu del Bullidor; una cruz que perteneció a la orden de los templarios.

Esta ruta propone una caminata tranquila por el norte de la comarca del Pla d’Urgell entre grandes campos de alfalfa, cereales y frutales. El cultivo más extendido es la fruta dulce, concretamente la manzana (en especial las variedades Golden Delicius) y la pera (destacando la Blanquilla y la Conference).

Con el objetivo de promover y hacer popular la manzana local, desde el año 1984 la localidad de Barbens celebra durante la primera quincena de octubre la Festa de la Poma i els Templers. Este proyecto cultural tiene una clara voluntad lúdica ambientando el núcleo histórico en un mercado medieval donde se ofrece todo tipo de productos alimenticios y artesanales como son los tradicionales estantes de manzanas, y con actuaciones teatrales de máximo rigor histórico como los templarios. La fiesta mayor se celebra el 15 de agosto, el día de l’Assumpció de Maria Santísima, y el 8 de noviembre es dedicado al patrón de Barbens, Sant Roc.

Es un municipio del Urgell, situado en la zona del llano regado por el canal d’Urgell, en el sur de la sierra de Almenara. Limita, al norte, con el municipio de Agramunt, al oeste con el de Penelles (la Noguera), al sur con Ivars d’Urgell (Lleida) y el enclave del Tarròs (municipio de Tornabous), y al este también con el Tarròs. El término municipal comprende los pueblos de La Fuliola, centro administrativo, y Boldú.

Antiguamente era una población cerrada, la Vila Closa, recluida sobre sí misma, y el conjunto era rodeado de murallas de la época medieval. De la Plaça del Portal situada en el centro salían dos calles que, a través de los respectivos portales, comunicaban con el exterior, uno a levante y otro a poniente. Todavía hoy se pueden ver los portales de acceso y algunas casas pairales. La función de estos portales era cerrar el núcleo de viviendas de las calles que quedaban fuera la muralla. En 1985 los muros y los portales de la antigua vila closa fueron declarados Béns Culturals d’Interès Nacional.

En el siglo XVI ya había construcciones fuera de la muralla. El crecimiento urbanístico, a pie de las carreteras y los caminos que de una manera radial salen del pueblo, se mantiene desde la segunda mitad del siglo XIX, cuando el Canal d’Urgell dio un gran impulso económico y demográfico a las localidades de esta comarca.

La Església parroquial de Santa Llúcia ha sufrido muchas modificaciones y ampliaciones a lo largo del tiempo; el último edificio fue realizado en el 1934. Es un edificio barroco que data del año 1783. Su autor fue Güell de Poblet. La fachada se caracteriza por una portalada enmarcada por pilastras sobre grandes zócalos y encima un rosetón. El campanario es de planta cuadrada con cuatro aberturas en la parte superior. El interior fue pintado por el barcelonés Jesús Massana. Este templo es moderno pero hay lugares del campanario donde se aprecian elementos de la antigua iglesia románica. La Creu de Terme está situada en las afueras del pueblo y es una construcción moderna del siglo XX.

La vida cultural y social se polariza, principalmente, en torno al Ateneo Popular, el Casal de los Jubilados, el Club de Bolos y el Taller de Bolillos (Vol i Boixet) que promueven diversas actividades y talleres. En cuanto a equipamientos culturales, la población dispone del Museu d'Armes, el Museu d’Arqueologia, Paleontologia i Mineralogia, y el Polideportivo. Cada jueves se celebra el mercado semanal.

La fiesta mayor de verano de La Fuliola se celebra el 25 y el 26 de julio, festividades de Sant Jaume y Santa Anna, y la de invierno por Santa Llúcia (13 de diciembre), la cual es dedicada a la iglesia de la población. Desde 1980 también se celebra la Festa del Segar i el Batre que comienza con la siega del maíz, en la segunda quincena de junio y sigue, en la primera quincena de julio, con la trilla del mismo. Sus organizadores quieren mostrar a los que no han visto nunca esta atmósfera campesina, todo lo que se vivía en Catalunya con motivo de la cosecha del trigo.

La zona del Pla d'Urgell, y en concreto, la población de Barbens limita con los municipios de Ivars d’Urgell y Vila-Sana donde se ubica el ya bien recuperado Estany d’Ivars i Vila-Sana. Un estaño desecado y desaparecido en el año 1951 con el fin de destinarlo al cultivo agrícola, y en la actualidad totalmente reconstruido desde principios de los 90. Cuenta con 126 hectáreas de superficie (el más grande de Catalunya), y numerosas especies de flora y fauna terrestre, acuática y aviar, que hacen del lugar un sitio muy visitado debido a la importante diversidad biológica que presenta.

Cabe destacar también, el Centre d’Interpretació Lluís Companys, una exposición permanente dedicada a la memoria del ex presidente catalán situada en el centro de su población natal y donde está su casa pairal, el Tarròs; un municipio de Tornabous ubicado a escasos quilómetros (2 km aprox.) de La Fuliola y Boldú. Este espacio está pensado y diseñado para explicar una etapa crucial de la historia de Catalunya y, al mismo tiempo, potenciar cultural y turísticamente el territorio del Urgell.

El poblado ibérico del Molí d'Espígol de Tornabous constituye uno de los ejemplos de urbanismo más desarrollado entre las poblaciones de los ilergets. Consta de dos espacios arqueológicos bien definidos: el espacio o ámbito urbano donde se encuentran los restos visibles y visitables actualmente y, un espacio o ámbito suburbano que se extiende hacia el norte, más allá de las murallas del oppidum. Asimismo, cabe destacar la existencia de una antigua balsa o estanque, actualmente desecada, fuera del núcleo amurallado que, seguramente, garantizaba el suministro de agua al asentamiento. En el año 2000 éste pasó a ser gestionado por el Museu d’Arqueologia de Catalunya, y desde 2009, el yacimiento fue declarado Bé Cultural d’Interès Nacional.

El Laberint de Blat de Moro se encuentra en la finca agraria "Masia l’Esperança" de Castellserà en la comarca del Urgell. Como todos los laberintos tradicionales está formado por una serie de caminos, algunos sin salida, que transcurren entre las hileras de maíz de la finca, y puede llegar a los dos metros y medio de altura. La excursión por el laberinto no tiene dificultades especiales y es muy recomendable para familias, ya que la visita tiene un componente de juego y diversión idóneo para el turismo familiar. Los usuarios tienen también a su disposición un mirador de madera de 6 metros de altura para poder ver los caminos del laberinto. Este proyecto se puso en marcha en el año 2006 y el periodo de apertura se prolongará hasta finales de septiembre o primeros de octubre, dependiendo de la temporada de cosecha del trigo.

El Espai Guinovart d’Agramunt es un centro de arte contemporáneo con una trayectoria que viene marcada principalmente por la voluntad de Josep Guinovart y Bertran de crear un espacio para la creación y la promoción del arte contemporáneo y, a la vez, un espacio con su obra expuesta permanentemente. Una obra que gira en torno al municipio de Agramunt (Urgell), su territorio, su paisaje y su gente; hecho que le da una singularidad plástica y conceptual excepcional, y que parte de una firme apuesta por lo local con voluntad de convertirlo en algo universal.

El Castell de Montclar está ubicado en la sierra de Montclar que limita con la comarca del Urgell por el norte y también hace de límite con la ribera del Sió. Su elevada posición hace que las vistas desde este lugar sean magníficas, tanto en el norte, donde está el Montsec, como en el sur, donde encontramos Agramunt y la sierra de Almenara. El castillo edificado sobre los restos de una antigua torre romana, muestra una elegante arquitectura del renacimiento catalán, datado en los siglos XVI y XVII, y restaurado por última vez en el año 1970. Su encanto principal se encuentra en la amplitud de sus estancias, la gran escalera que sube hasta la planta noble, y la arquitectura exterior. Visitando el castillo nos encontramos con: el salón de música, la biblioteca, el comedor, la habitación de los señores, la bodega, la prisión, etc. Es de las pocas fortalezas habitadas hoy en día que permite celebrar bodas, banquetes y celebraciones en sus dependencias.

El complejo del Castell del Remei que pertenece al término de Penelles en la comarca de la Noguera consta de 400 hectáreas en un impresionante paraje con numerosos edificios entre los que cabe destacar el castillo, la bodega, el santuario dedicado a la Verge del Remei, el restaurante, los dos lagos y el salto de agua, junto con otras instalaciones históricas como el antiguo molino de aceite, la harinera, la destilería y los talleres de fabricación de botas. Actualmente, el Castell del Remei gestiona 140 hectáreas de viñedo, 70 de las cuales son propias. El resto son de agricultores de la zona, a los que se les hace el asesoramiento y supervisión durante todo el año.